San Nerses Chnorhali (1102-1173)
patriarca armenio
Jesús, el único Hijo del Padre
He vagado por el desierto,
Extraviado en el desierto,
Uno entre cien
Como en la parábola de la oveja.
El malvado enemigo lo hizo pedazos:
Lo cubrió de heridas incurables;
Por tanto no existe otra cura para la herida.
Pero tú, para curarlo.
Entre torrentes de lágrimas te imploro,
Elevo mis clamores a mi Señor:
Oh Buen Pastor, baja del cielo,
Id en busca del pequeño rebaño.
Señor, busca la moneda caída,
Tu imagen que se perdió (Gn 1,26),
Que pisoteé en el vicio del pecado
Y el barro apestoso.
Lávame, Señor, de mi inmundicia;
Haz que mi alma sea pura como la blancura de la nieve (Is 1,18).
Inventa el número de las diez monedas.
Como hiciste con los cuarenta santos [de Sebaste].
Llévame sobre tus hombros, oh tú que llevaste la cruz;
Alégrate de levantar mi alma caída.
Dale alegría a la hueste celestial de ángeles.
Al regreso de un solo pecador.
Comments